Servicio de patrimonio documental e bibliográfico - Deputación de Pontevedra

Área de contido e estrutura

• Alcance e contido Folla: 19,21 Señores: Presidente; Excmo. Sr. Gobernador Civil Don José González-Sama García. Presidente; Sr. Lorenzo Docampo. Vicepresidente; Sr. Puig Gaite. Diputados: Sr. Alvarez Alvarez, Areses Pérez, Blanco Fuentes, Carballal Morgade, González Taboada, Legerén Campos, Lombos Vidal, Massó García, Peñarredonda Fernández, Piñeiro Durán, Queimadelos Puime, Rey Daviña. Secretario; Sr. Casas Fernández. 1. "Posesión del nuevo Presidente de esta Excma. Corporación Provincial, ILtmo. Sr. Don Enrique Lorenzo Docampo". Presidida por el Excmo. Sr. Gobernador Civil, Don José González-Sama García, y con asistencia del Vicepresidente en funciones presidenciales ILtmo. Sr. Don Antonio Puig Gaite, y los señores Diputados: Don Faustino Alvarez Alvarez, Don Rafael Areses Pérez, Don Mario Blanco Fuentes, Don Gerardo Carballal Morgade, Don Luis González Taboada, Don Julio Legerén Campos, Don Antonio Lombos Vidal, Don José Maria Massó García, Don Ramón Peñarredonda Fernández, Don Mario José Piñeiro Durán, Don Cesareo Queimadelos Puime y Don Jacobo Rey Daviña, celebra sesión extraordinaria el Pleno de esta Excma. Diputación Provincial, previamente convocado conforme a lo prevenido en el articulo 266 de la Ley de Régimen Local, Texto refundido de 24 de junio de 1955 y 244 del Reglamento de Organización, Funcionamiento y Régimen Jurídico de las Corporaciones Locales, siendo las trece horas del dia de hoy, doce de junio de mil novecientos sesenta y tres, en el Salón de Actos del Palacio Provincial. Asiste también el ILtmo. Sr. Don Enrique Lorenzo Docampo como Presidente entrante, dando fé el Secretario General de la Corporación, Don Manuel Casas Fernández. Siendo la única finalidad de esta sesión extraordinaria el posesionar al nuevo Presidente, por el Excmo. Sr. Gobernador Civil, se dispone al Sr. Secretario, como lo verifica, la lectura de los artículos 222, 225 y 226 de la Ley de Régimen Local; 137 del Reglamento de 17 de mayo de 1952, y del Decreto de 29 de enero de 1959, referentes al nombramiento por el Ministerio, jura del cargo y facultades gubernativas para convocar sesiones de carácter extraordinario y presidirlas con voto. Igualmente se ordena al Sr. Secretario actuante la lectura del oficio del Gobierno Civil de esta Provincia, que dice literalmente así: "Iltmo. Sr: -El Excmo. Sr. Ministro de la Gobernación en fecha 22 de los corrientes, me dice lo siguiente: "Visto el oficio de V.E. en el que propone a Don Enrique Lorenzo Docampo como Presidente de la Diputación de esa provincia.- Este Ministerio, de conformidad con dicha propuesta y haciendo uso de las facultades que le confiere la vigente Ley de Régimen Local, ha acordado el nombramiento de Don Enrique Lorenzo Docampo para el cargo de Presidente de la Diputación de Pontevedra". Lo que me complazco en participar a V.I. para su conocimiento y efectos, y debiendo tomar posesión en la sesión extraordinaria de la Corporación que se celebrará en la fecha y hora que se expresa al margen. Dios guarde a V.I. muchos años. Pontevedra, 29 de mayo de 1963. El Gobernador Civil. José González Sama Garcia. Rubricado. Al margen: miércoles, día 12 de junio a las trece horas. Puestos en pie todos los señores asistentes, autoridades y jerarquías que asistieron a esta solemnidad oficial, toma posesión del cargo ante el Pleno de esta Excma. Diputación que preside el Excmo. Sr. Gobernador Civil, prestando juramento de viva voz ante el Crucifijo y de rodillas en los siguientes términos: "Juro lealtad y acatamiento a los principios fundamentales del Movimiento Nacional y demás Leyes Fundamentales del Reino; servir fielmente a España, guardar lealtad al Jefe del Estado, obedecer y hacer que se cumplan las Leyes, defender y fomentar los intereses de la provincia, mantener su competencia y ajustar mi conducta a la dignidad del cargo". El Excmo.Sr. Gobernador Civil, contestó: "Si así lo hacéis, Dios y España os lo premien; y si no, os lo demanden". Seguidamente la primera autoridad gubernativa de la provincia y Presidente nato de la Corporación, hace entrega del bastón e insignias del cargo al Iltmo. Sr. Don Enrique Lorenzo Docampo que queda investido, por tanto, de la autoridad, tratamiento, deberes y derechos que corresponden a la Presidencia de la Excma. Diputación Provincial de Pontevedra. Inmediatamente el Presidente entrante Iltmo. Sr. Don Enrique Lorenzo Docampo, hace uso de la palabra en los siguientes términos. "Excelentísimos señores: Mis primeras palabras son para agradecer, de todo corazón, vuestra presencia en el momento de tomar posesión de la Presidencia de esta Corporación que lleva consigo aparejado, la responsabilidad de un cargo al servicio de toda la Provincia. Esta demostración de afecto y las numerosas felicitaciones que estoy recibiendo en estos días, vienen a reforzar mi deseo de una linea de conducta justa y sincera. Bien sabe Dios que el único y supremo fin que me trae a este puesto, es una gran voluntad, dispuesto a seguir un camino recto, sin interferencias de ninguna clase y fuera de todo deseo o apetito de carácter particular, que pueda llevar aparejado alguna injusticia o menoscabar el interés supremo de la Provincia, dentro de los deberes que correspondan a la Diputación, a la que desde este momento me debo, y entrego con toda mi alma. No obstante, creo que, independientemente de otros importantes asuntos que precisarán de la atención constante de la Corporación, existen tres problemas en la Provincia que constituirán una verdadera obsesión para esta Presidencia, entre tanto no se les dé una solución adecuada. Voy a señalarlos por el siguiente orden: a) Escuelas. Es nuestro deber de españoles y cristianos fomentar y conseguir que todos los hijos de esta Provincia cuenten con los medios de instrucción adecuados para que adquieran la cultura necesaria que les acredite como ciudadanos aptos para defenderse en su lucha por la vida, acrecentando el nivel intelectual de nuestra Provincia. Nuestros esfuerzos deberán concentrarse inicialmente en aquellos pueblos carentes de escuelas o locales higiénicos y dignos para alumnos y maestros. b) Caminos vecinales. Es nuestro propósito dedicar una atención permanente a la red de caminos y carreteras provinciales, seleccionando mediante un estudio detenido aquellas que se consideren básicas para el desarrollo de la Provincia, que serán atendidas con carácter preferente, tanto en sus apremiantes necesidades actuales, como en su entendimiento y conformación futuras. c) Beneficencia. Es este otro de los segundos problemas que tiene obligación de enfrentarse la Diputación para hacer más llevadera la desgracia del desheredado de la fortuna pues aún que el Poder Central tiene ya sus Organismos que atienden en su medida muchas de estas necesidades, los medios no son suficientes, y es preciso poder darles mayor amplitud a estas obras e instituciones benéficas, desde luego con la tutela y control de la Diputación, y dentro de la mayor austeridad en sus gastos. En mis primeras manifestaciones a la Radio y Prensa, cuando fui informado de este nombramiento, he dicho ya que uno de los motivos de mi mayor preocupación, sería el contribuir a que la Diputación se esfuerce en poner remedio a estas necesidades tan apremiantes, que acabo de señalar y que creo serán del agrado de todos. No pretendo creais que soy un iluso y que estoy en posesión de la vaca mágica de la virtud, que pueda transformar la marcha de las cosas por arte de birbibirloque. Sé de antemano que este Organismo no puede gobernar a gusto de todos, pero procuremos que los satisfechos sean los más y así habremos contribuido a realizar una buena obra y podremos reflexionar al retirarnos a nuestras casas que hemos cumplido con nuestro deber. Las necesidades de la provincia, en lo que depende de la Diputación, no las conozco muy de cerca, pero pretendo conocerlas interesar de los departamentos afectados, dentro de la Corporación, me sean expuestos con la misma claridad con que yo los solicito y poder así elaborar un programa que previamente estudiado, pueda ser abordado dentro de la mayor urgencia. Mi lenguaje como podéis observar, es sencillo y claro, no será lo ortodoxo que quisiera, pero es el que creo se entiende, sin frases académicas más o menos literarias, pues digo las cosas como las siento y para que todos puedan comprenderlas. Todos sabeis tengo muchos años, y espero y pido fervorosamente a mi Cristo de la Victoria, me conserve muchos más para que podamos llegar a recoger los frutos de la labor que estamos obligados a emprender, y que con la colaboración sincera de todos, espera conseguir. Lo que os pido, mis compañeros de Corporación y amigos todos, es que me ayudéis en esta labor que empezamos y que podamos llevar a la provincia por los derroteros de prosperidad y grandeza a que todos aspiramos. He de recordar antes de terminar, y es un grato deber por mi parte el hacerlo así, al gran Presidente a quien tengo el honor de suceder en esta Presidencia, nuestro entrañable y recordado buen amigo Don Prudencio Landín Carrasco, actual Gobernador Civil de Guadalajara, a quien envío, en nombre de esta querida Diputación Provincial, un saludo cariñoso y cordial, aprovechando este acto de mi toma de posesión. Que conste en acta y que sea éste el primer acuerdo de parte de esta Presidencia. No pido más que sigamos las mismas huellas o iguales directrices de austeridad que el ha trazado al frente de esta Diputación, porque la certera visión de sus asuntos y su gran competencia y dinamismo, ha hecho que este Organismo se encuentre actualmente en una franca situación progresiva que permite ver el futuro con optimismo. He de hacer ofrecimiento antes de terminar, de mi leal y definitiva colaboración, al verdadero paladín de la provincia, nuestro querido Gobernador Civil, Presidente nato de esta Corporación, Don José González-Sama, asegurandole nuestro mayor respecto y apoyo con verdadero entusiasmo y afecto, en defensa de los intereses de todo orden para la provincia, pues es en verdad dificil encontrar un gobernador que tenga mayor dinamismo y más clara visión de los problemas que le afectan. Reitero como final, mi respecto y fe inquebrantables en nuestro Generalísimo Franco, pidiendo a Dios le conserve su vida muchos años para bien de España entera y de los que trabajamos a sus ordenes.- ¡Viva Franco! ¡Arriba España!. A continuación el Excmo. Sr. Gobernador Civil, Don José González-Sama García, dirigiendose a todos los asistentes al acto, pronuncia las siguientes palabras: "Excmas. Autoridades, Corporación Provincial, señores: -Unas palabras muy breves como final de este acto. Todos tenemos en el corazón el recuerdo de los momentos agridulces de la despedida del gran Presidente Prudencio Landin, nuestro intimo, entrañable y querido Pucho, hombre que ha dejado en esta Corporación provincial un ejemplo extraordinario de la labor y eficacia, y en todos, absolutamente todos los pueblos de la provincia, y de ello buen testimonio pueden dar cualquiera de los alcaldes de ella, el recuerdo de una ponderación, de un dificil equilibro en el estudio de los problemas, de la aplicación de los recursos, como pocas veces -y ésto es lo ejemplar en él-, se da en los cargos públicos que con una limitada potencia económica han de tratar de cubrir un amplio, un vasto campo de necesidades. Hoy se incorpora al mando, a la Presidencia de la Diputación Provincial, un hombre como Enrique Lorenzo que por mi parte creo sería pueril tratar de hacer una presentación. Lo conoceis todos vosotros mucho mejor que yo. Hombre de dinamismo, de capacidad, con una extraordinaria ilusión que desborda de su corazón, de su alma, que se ha hecho, se ha forjado -como él dice-, en el duro yunque del trabajo, pero que sin embargo él ha sido capaz de restar horas al descanso, al sueño, para aplicarlas con una verdadera juventud, juventud de corazón e incluso de energias, en parte, casi pudieramos decir hasta ahora, a empresas, a actividades, a desarrollos de todo lo que significa Vigo y sus intereses y aspiraciones, y que hoy, ese mismo ímpetu, esa misma capacidad de trabajo, esa dedicación, estamos seguros que la volcará, sin reservas y sin regateos, al servicio de los más altos intereses de la provincia pontevedresa. -Va a contar con una Corporación provincial- que yo quiero aprovechar este momento y esta circunstancia para destacar su deseo de trabajo y un ansia de colaboración en todo lo que signifique el progreso provincial, que es verdaderamente admirable y por eso lo destaco. Contando con un equipo de hombres como esta Corporación Provincial y la alta calidad de los funcionarios de la misma, yo estoy seguro que Enrique Lorenzo, empuñando el timón de la nave pontevedresa sabrá llevarla por los mismos derroteros de éxito y prosperidad que la llevó al anterior Presidente, Pucho Landin. Tiene mucho que hacer la Diputación Provincial. Todo ésto que nos acaba de indicar Enrique Lorenzo, como sus primeras o más amplias preocupaciones. Pero creo que también la Diputación, y en ello ya está trabajando con la Obra Social del Movimiento, con la Comisión de Servicios Técnicos, ha de trazarse metas más ambiciosas aún, más lejanas, sin desasistir, sin abandonar desde luego estos problemas, que son de volumen y además urgentes, inmediatos, que no admiten aplazamiento. Pero es que creo, no sé si ha llegado ya el momento de replantearse en su totalidad la provincia de Pontevedra, y en ello la Corporación Provincial no solo tiene que decir su palabra sino también alargar su brazo. Creo que va llegando la hora, si no es llegada ya, de este nuevo replanteo. Tenemos una provincia en la que no sé si es conveniente la actual división administrativa; si son necesarios el número de municipios en que está fragmentada, y si como consecuencia de unas realidades económico-sociales que son insoslayables y que cada vez se plantan de una forma más aguda, hay que llegar a una reorganización completa de la vida municipal. Tenemos que buscarnos también un replanteamiento, sobre el que ya estamos trabajando, para tratar de resolver, hasta donde humanamente sea posible, el grave problema de la terrible carga económica que ésto supone. Hay que encontrar, dentro de cada municipio, los tres, los cuatro o los seis núcleos urbanos sobre los que debe girar toda la vida del término municipal. Y a esos si, dotarlos de todos los elementos, de todas las exigencias de la vida moderna, desde una urbanización a un abastecimiento de agua; desde locales recreativos hasta grupos escolares, pero lo que no podemos es seguir hilvanando en centenares, por no decir millares de kilómetros con esas lineas telefónicas, con esos tendidos eléctricos, que ya solo de gastos de primer establecimiento suponen centenares de millones, y en perdida por ejemplo de energia eléctrica o en conservación, una carga que no podemos soportar. Y en definitiva también tenemos que estudiar el problema de nuestras comunicaciones, que va aparejado a los dos anteriores. No puede permitirse la Provincia de Pontevedra el lujo de sostener una red de más de mil kilómetros, porque con el presupuesto de que dispone la aplicación que puede hacer por kilómetro y año es ridicula y no llega al bacheo. Luego vienen las quejas, las crónicas, las acusaciones de los corresponsables del pueblo A y del pueblo B, cargados de razón, pero nosotros tenemos que encontrar dentro de cada término municipal cuales son las rutas por las que discurre realmente la vida económicay social del municipio. A ellas dedicar nuestra atención y los limitados recursos de que disponemos, y cuando tengamos esas redes primarias o principales en las debidas condiciones nos ocuparemos o no nos ocuparemos de las otros, que la mayor parte de las veces no se deben más que a influencias excesivamente localistas de parroquia o de campanario, en que cada uno monta, construye su casa donde le parece sin sujetarse a ningún plan y después quieren la carretera, el teléfono, la energía eléctrica y todos los servicios que es imposible sostener y llevar en una provincia con los recursos de esta, que tiene tanto o más kilómetros, dentro de su limite, como la provincia de Barcelona. Señores creo que vamos caminando hacia unos momentos, si no hemos entrado en ellos ya, en que hay que plantearse toda una cuestión política con toda crudeza, con todo realismo y buscando cuantos asesoramientos y colaboraciones técnicas y económicas sean precisas. Pero esta provincia ha de replantearse, de pies a cabeza, haciendo desaparecer de ella sobre todo la anarquía urbanística, que es como podemos calificarla. Y en ello la Corporación Provincial tiene un juego importantísimo, de primer orden, porque puede ser encauzar la vida de Pontevedra para muchos decenios. Nada más señores. Esforcémonos todos en colaborar en esta gran tarea dentro de nuestra provincia. Contribuyamos al progreso de España a las ordenes del Caudillo, cumpliendo fielmente todos con nuestro deber y sus consignas, con el realismo y la exactitud que nos la da. Que Dios nos ayude a salir con éxito de la empresa ¡Pontevedra, adelante!. Los asistentes premiaron con un aplauso general y prolongado las intervenciones de los señores Lorenzo Docampo y Gónzalez-Sama García. Para cumplimiento de lo ordenado por la Superioridad, se acuerda elevar a la Dirección General de Administración Local, copia certificada del acta de toma de posesión del nuevo ILtmo. Sr. Presidente, Don Enrique Lorenzo Docampo. Se levantó la sesión, siendo las trece cuarenta y cinco horas del expresado dia, de todo lo que como Secretario doy fé. ------

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